¿Por qué realmente odian los perros a los carteros ?

¿Alguna vez te has preguntado por qué los perros parecen tener un problema particular con los carteros ? Aunque la imagen de un perro ladrando a un cartero se ha convertido en un cliché, este fenómeno tiene fundamentos reales. Los comportamentalistas y educadores caninos han llevado a cabo numerosas observaciones y estudios para entender mejor esta peculiar relación.

Entender el comportamiento canino

Origen del conflicto

Para entender por qué los perros tienden a mostrar agresividad hacia los carteros, hay que comprender primero el funcionamiento de su cerebro y sus instintos naturales. Los perros son animales territoriales por naturaleza: cuando ven a alguien acercarse a su espacio personal, sienten que tienen que defenderlo.

Ciclo de refuerzo

Tony, un educador canino, explica cómo este comportamiento se ve reforzado en las interacciones con los carteros. El ciclo es simple: el perro ladra al cartero, éste deja el correo y se va, lo que da al perro la impresión de haber logrado ahuyentar al intruso. Este ciclo de refuerzo significa que cada vez que ocurre este evento, el comportamiento del perro es validado y se vuelve más arraigado.

El instinto de protección del territorio

Protección frente a invasión

Cuando un cartero entra en el jardín o en la entrada de una casa para entregar el correo, los perros lo ven como un invasor. Por instinto, ladran y a veces incluso muestran signos de agresión para proteger su territorio.

Comportamiento territorial

Es importante señalar que el comportamiento territorial no es exclusivo de los perros en relación con los carteros. Se puede observar este comportamiento en diversas situaciones en las que los perros perciben una amenaza a su territorio o a sus seres queridos.

¿Los carteros: extraños amenazantes ?

Una figura desconocida

Para un perro, un cartero es una figura desconocida que se acerca regularmente a su espacio personal. Aunque el cartero no tenga intención de hacer daño, el perro puede percibirlo como una amenaza debido a su falta de familiaridad con él.

Cartero vs Propietario

• Tony, educador canino, explica que esto se ve reforzado por el hecho de que el cartero llega, deja algo (el correo) y luego se va. Esto contrasta con la forma en que un dueño de casa entra y sale regularmente del hogar, lo cual es familiar para el perro.

Después de entender cómo los perros ven a los carteros desde su punto de vista, exploremos cómo las rutinas y factores externos pueden influir en esta interacción.

Rutinas y desencadenantes

Rutina diaria del cartero

La rutina diaria del cartero – visitar la misma casa a la misma hora todos los días, puede convertirse en un desencadenante para el perro. Este patrón regular de comportamiento puede hacer que el perro anticipe la llegada del cartero y reaccione en consecuencia.

Modo de transporte

El modo de transporte del cartero también puede ser un factor. Muchos carteros entregan el correo en bicicleta, y el movimiento rápido de una bicicleta puede estimular el instinto de caza natural del perro, lo que lleva a una mayor excitación y potencialmente a un comportamiento más agresivo.

Este fenómeno no solo afecta al perro, sino también al propio cartero.

Impacto del cartero en la vida diaria del perro

Riesgo de mordeduras

En Francia, se estima que cada día unos tres carteros son mordidos por perros.. Esto ha llevado a La Poste a introducir formación para su personal sobre cómo lidiar con los perros. De hecho, las mordeduras de perros son la segunda causa principal de ausencia laboral entre los carteros.

Mala reputación

La socialización puede desempeñar un papel importante en la gestión de estas reacciones caninas.

El papel de la socialización en la reacción canina

Los beneficios de una buena socialización

El entrenamiento y la socialización adecuada desde una edad temprana pueden ayudar a un perro a entender que los carteros no son una amenaza. Esto puede reducir la posibilidad de reacciones agresivas hacia ellos.

Riesgos de una mala socialización

Por el contrario, un perro que ha tenido pocas interacciones con personas ajenas a su familia puede ser más propenso a percibir a los carteros como una amenaza.

Ahora que hemos identificado las causas del conflicto, veamos cómo podemos ayudar a nuestros amigos caninos a aceptar mejor al cartero.

Cómo ayudar a tu perro a aceptar al cartero

Educación y formación

La educación es clave para cambiar el comportamiento de un perro hacia los carteros. Esto puede incluir enseñarles comandos específicos para ayudarles a calmarse cuando llega el cartero, o incluso introducirles gradualmente al cartero para que se acostumbren a su presencia.

Ajustes en el entorno

Hacer ajustes en el entorno del perro también puede ser útil. Por ejemplo, si tu perro tiende a ladrar al cartero desde la ventana, puedes intentar limitar su acceso a esta durante las horas habituales de entrega del correo.

Además de estas soluciones prácticas, hay varios consejos generales para aliviar el miedo de los perros que pueden ser útiles en este contexto.

Consejos para calmar el miedo de los perros

Manejo del comportamiento

La gestión adecuada del comportamiento es crucial. Debes recompensar a tu perro por mantener la calma cuando llega el cartero y evitar castigarlo por ladrar, ya que esto puede aumentar su ansiedad.

Incorporación de elementos positivos

Incorporar elementos positivos en la experiencia de tu perro con el cartero también puede ser útil. Por ejemplo, puedes darle un premio o jugar con él después de que el cartero se haya ido para asociar esta visita con algo positivo.

En resumen, la relación entre los perros y los carteros suele estar marcada por una mezcla de territorialidad, percepciones erróneas y instintos naturales. Sin embargo, mediante la educación tanto de los dueños como de los carteros sobre cómo manejar estas situaciones, podemos reducir los incidentes desagradables y preservar la tranquilidad en nuestras interacciones diarias.